Las tensiones en el mercado cambiario se exacerban. El dólar blue trepó por encima de los 1.000 pesos. Cerró la jornada en $1.010 para la punta vendedora, luego de tocar un nuevo récord nominal de $1.050. En la city platense, cerró en promedio a $1.025 pero con escasa oferta y gran amplitud entre las puntas compradora y vendedora, ya que había operadores que sólo vendían a $1.100, en un mercado con escasas referencias y mucha incertidumbre.
Con este nuevo incremento de 65 pesos respecto del cierre de ayer, la brecha cambiaria entre el dólar blue y el dólar oficial mayorista se incrementa arriba del 188%, reflejo de la incertidumbre cambiaria que se desató en el país cuando faltan apenas siete ruedas para las elecciones generales del 22 de octubre.
Así, luego de comenzar la semana con una fuerte tendencia al alza, el tipo de cambio informal alcanzó por primera vez las cuatro cifras.
De esta forma, la divisa estadounidense en el mercado informal aumentó 130 pesos en lo que va de la semana y batió su récord nominal.
Desde el Gobierno insistieron con que esta situación es producto de “maniobras especulativas”.
La divisa paralela había cerrado el lunes a 945 pesos y desde las primeras operaciones acentuó su raid alcista sin encontrar un precio tope.
Por su parte, los dólares financieros también operaron al alza, siguiendo la cotización “blue”. El dólar contado con liquidación (CCL) “libre” cotizó a $980,59, un salto diario de $96,15 (+9,8%), luego de que el lunes se registraran pocos movimientos debido al feriado del Columbus Day en Estados Unidos.
En cuanto al dólar MEP mediante la compra-venta de bonos AL30, segmento donde diariamente el Banco Central (BCRA) interviene para intentar frenar las alzas, subió $8 y alcanzaba los $847,10 (+0,9%). Si la operación se concretaba con títulos GD30, trepaba $16 y tocaba los $853,41 (+1,9%).
Esta escalada se produjo al mismo tiempo que el Gobierno unificó el valor de la divisa en $731 para las versiones, Ahorro, Tarjeta y Qatar, elevando nuevamente la percepción del impuesto a los Bienes Personales del 5% al 25% (ver aparte).
El dólar oficial se mantiene en $365,50 y el mayorista que rige las operaciones de comercio exterior continúa en $350.
En medio de estas turbulencias, desaparecieron los habituales arbolitos que ofrecen el ‘dólar blue’ a los turistas en el centro de Buenos Aires. En contraste, la policía realizó nuevos allanamientos a las oficinas, llamadas ‘cuevas’ de la city porteña, donde se concretan esas transacciones.
En este contexto, el ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, enfatizó que meterá presos a quienes especulan con la volatilidad cambiaria.
En la rueda operativa del mercado mayorista se duplicó el monto operado, que alcanzó los U$S481 millones en el segmento de contado (spot), desde los U$S205,1 millones del lunes. El mayor volumen respondió a una muy firme demanda de divisas, que obligó al BCRA a efectuar ventas por U$S220 millones, la cifra más alta desde el 3 de abril de este año. De esta forma, en lo que va de octubre el BCRA anota ventas netas por 468 millones de dólares.
LAS RAZONES DEL SALTO CAMBIARIO
Desde fines de septiembre, la divisa paralela no para de subir. En apenas tres días hábiles pasó los $800 (el viernes 6); los $900, este lunes 9, y ahora supero los $1000. Así la brecha con el dólar mayorista se acerca al 200%.
La semana pasada, la divisa paralela trepó $80, la suba más importante post devaluación.
Mientras el Gobierno busca reforzar los controles, con operativos en la City para “desactivar las cuevas”, nuevas restricciones a la operación en los dólares financieros y la unificación de los impuestos sobre el tipo de cambio oficial, la dolarización como cobertura electoral parece no tener límite.
Aparte de los cruces entre los candidatos presidenciales de las tres fuerzas más votadas, Javier Milei, Patricia Bullrich y Sergio Massa, por ls responsabilidad en la corrida cambiaria (ver página 6), se le agrega la falta de reservas del Banco Central, ya que pese a los regímenes diferenciales que extendió el ministerio de Economía hasta el próximo 22 de octubre, este es uno de los grandes problemas que tiene el Gobierno para poder estabilizar el tipo de cambio informal.
El Banco Central no logra elevar el nivel de reservas porque destina gran parte de ellas en intervenir el dólar financiero, pagar importaciones y saldar deudas con los organismos internacionales.
La emisión monetaria es el otro gran factor. El Gobierno anunció una serie de medidas -bonos, baja de ganancias y devolución del IVA- que volcarán más dinero a la calle en una economía que ya de por sí tiene baja demanda de pesos.
La incertidumbre electoral que hay de cara al próximo 22 de octubre también influye. Tanto las personas como las empresas eligen dolarizarse hasta conocer cuál será el plan económico que desarrollará la próxima gestión.
En respuesta a la situación, los inversores apuestan a la bolsa para protegerse de una devaluación. El índice Merval experimentó una fuerte alza de 10,03%.
“Hoy (martes) hubo mucha volatilidad. La demanda (de acciones) es una manera de dolarizarse ante las restricciones cambiarias. Subieron acciones que tienen activos muy atados al dólar”, explicó el economista Hernán Letcher.
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