El movimiento Ni Una Menos volvió a hacer historia el 3 de junio de 2024, cuando miles de mujeres se congregaron frente al Congreso Nacional para manifestarse en contra de la violencia machista. La marcha, que se realiza anualmente, busca visibilizar y denunciar la violencia de género que afecta a mujeres en todo el país. Este año, la convocatoria fue particularmente emotiva y contundente, reflejando la creciente indignación y demanda de justicia y políticas efectivas para combatir esta problemática.
Desde tempranas horas de la tarde, diversas organizaciones feministas, colectivos de mujeres, y activistas comenzaron a reunirse en la Plaza de Mayo, desde donde marcharon hasta el Congreso. Con pancartas, carteles y cánticos, las manifestantes exigieron el fin de los femicidios, violencia de género, y la implementación efectiva de políticas públicas que protejan a las mujeres y niñas.
En el acto central, varias oradoras tomaron el micrófono para relatar sus experiencias y las de muchas otras mujeres que han sido víctimas de violencia. Los discursos se centraron en la necesidad de un cambio estructural que incluya no solo medidas punitivas, sino también educativas y preventivas. Se hizo un llamado al gobierno y a la sociedad para que se involucren activamente en la erradicación de la violencia machista.
Una de las consignas más resonantes de la marcha fue “Vivas nos queremos”, un grito que simboliza la lucha por el derecho a una vida libre de violencia. Además, se recordaron a las mujeres que han sido asesinadas en el último año, exigiendo justicia para ellas y sus familias. La multitud también exigió mayor presupuesto para los programas de protección y asistencia a víctimas de violencia de género.
El movimiento Ni Una Menos surgió en 2015 como respuesta a la creciente ola de femicidios en Argentina y rápidamente se convirtió en un símbolo de la lucha contra la violencia de género en América Latina y el mundo. Cada año, la marcha no solo es una manifestación de dolor y denuncia, sino también de resistencia y solidaridad entre mujeres de todas las edades y contextos.
Entre las demandas más destacadas de este año, se incluyeron la implementación efectiva de la Ley Micaela, que obliga a los funcionarios públicos a recibir capacitación en género y violencia contra las mujeres, y la creación de refugios seguros para víctimas de violencia. También se reclamó la igualdad de oportunidades en el ámbito laboral y la eliminación de la brecha salarial de género.
La marcha de este año tuvo una gran cobertura mediática y presencia en las redes sociales, donde se compartieron imágenes y videos de la manifestación, así como mensajes de apoyo y solidaridad desde diferentes partes del mundo. Este evento demuestra una vez más que la lucha contra la violencia de género sigue siendo una prioridad para miles de mujeres que no están dispuestas a callar hasta que todas puedan vivir libres y seguras.
Otras noticias
-
Condenan a tres años en suspenso al empresario que destruyó nidos de pingüinos en Punta Tombo
-
Valentina Cervantes confirma su separación de Enzo Fernández y desmiente conflictos
-
L-Gante enfrenta pedido de 7 años de prisión en juicio por amenazas y privación de libertad
-
Muere Ginés González García a los 79 años
-
Estudiantes de la UBA continúan con medidas de fuerza ante el paro nacional