Pocas horas después de que se confirmara que Patricia Bullrich será la ministra de Seguridad, la vicepresidenta electa, Victoria Villarruel, concretó un fuerte gesto político. Visitó el Departamento Central de la Policía Federal y de Gendarmería y en ese marco descartó que se fusionen los ministerios de Seguridad y Defensa.
Además, dijo que se reunirá con todas las fuerzas, aunque aclaró que “no implica ningún gesto en particular”. La referencia pareció apuntar al hecho de que Villarruel era mencionada para quedarse con el control de ambas carteras.
“No se van a fusionar los ministerios de Defensa y Seguridad, cada uno tiene su ámbito, así que así continuará. Cuando asumamos el 10 de diciembre, el presidente Milei va a informar los nombres (de quiénes estarán a cargo), pero más allá de esa decisión, sea Patricia Bullrich o cualquier otra persona, siempre va a contar con mi apoyo como vicepresidenta de la Nación y presidenta del Senado”, dijo Villarruel al retirarse del edificio Centinella.
Milei le había prometido, prácticamente desde que cerraron las listas, que comandaría de manera global el área de Seguridad (junto a Defensa y Justicia). Sin embargo, todo cambió en las últimas horas cuando en la noche del jueves se confirmó el regreso de Bullrich al ministerio de Seguridad, cargo que ocupó en la presidencia de Mauricio Macri. En tanto, Luis Petri desembarcaría en Defensa.
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