El líder de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), Facundo Jones Huala, fue internado en la ciudad chubutense de Esquel como consecuencia de los problemas de salud que le causó la huelga de hambre que inició diez días atrás.
El activista había adoptado tal decisión el pasado 18 de noviembre, a modo de protesta por su inminente extradición a Chile.
La justicia del país trasandino había pedido dicha extradición en el marco de la causa en la que Jones Huala fue condenado a nueve años de prisión por el incendio de una casa en la localidad chilena de Río Bueno, en enero de 2013, y por la tenencia ilegal de armas de fuego.
En el documento donde se solicita que Jones Huala sea enviado a Chile, se determina que el líder mapuche deberá cumplir lo que le queda de la pena -un año y cuatro meses de cárcel- en el país vecino.
“De conformidad con lo dictaminado por el señor Procurador General de la Nación interino, se confirma la sentencia apelada en cuanto declaró procedente la extradición de Francisco Facundo Jones Huala a la República de Chile para el cumplimiento del remanente de pena por el cual se lo había requerido”, explaya la sentencia.
Por su parte, el Movimiento Mapuche Autónomo del Puelmapu señaló mediante sus redes sociales pidió por la libertad del dirigente, quien “se ajustó a derecho según la ley del Estado argentino”, indicó.
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