Elecciones 2023.- Así quedó el mapa del Conurbano: cómo se votó en el Gran Buenos Aires


En estas elecciones 2023, la aceitada maquinaria del PJ bonaerense volvió a ser decisiva para apuntalar a los jefes comunales del Conurbano en sus sillones, y en algunos casos reconquistar sus distritos respecto de las PASO. En el siempre intenso universo del conglomerado más poblado del país, solamente un distrito cambió de manos: Lanús, donde el candidato camporista de Unión por la Patria (UPP) desbancó a Juntos por el Cambio (JXC).

En otros dos partidos, los oficialismos que habían sido derrotados -Morón e Ituzaingó, ambos de UPP-, lograron reponerse con creces. Además, los candidatos mileístas de La Libertad Avanza (LLA) se apoderaron de varios segundos puestos, un logro que siempre fue en detrimento de JXC.

En Lanús, Diego Kravetz, de Juntos por el Cambio -mano derecha del derrotado candidato a gobernador e intendente de licencia, Néstor Grindetti- no logró achicar la diferencia de más de cinco puntos con Unión por la Patria para retener el distrito que la fuerza gobierna desde 2015. En cambio, el ex secretario de Justicia nacional Julián Alvarez, referente de La Cámpora, estiró su victoria a diez puntos, 44 a 34 por ciento.

En Morón, el intendente sabbatellista Lucas Ghi (Unión por la Patria), que había quedado segundo en las PASO con el 34%, perdiendo contra JXC, dio vuelta la elección creciendo hasta el 43% y dejó atrás a Leandro Ugartemendia, el larretista que había ganado la interna opositora en el distrito.

En Ituzaingó, Pablo Descalzo, hijo del “eterno” Alberto Descalzo, quien está frente del partido desde 1995, cuando se creó, consiguió la remontada que necesitaba para asegurar la permanencia de la dinastía: segundo en las PASO con el 34,8%, subió hasta el 43% y le sacó once puntos a Gastón Di Castelnuovo, de JXC.

Elecciones 2023: victorias abrumadoras

Ni los escándalos, ni las denuncias de corrupción, ni la crisis económica mellaron las chances de los nuevos “barones” peronistas, que en la mayoría de los casos superaron el 50 por ciento de las adhesiones.

Esto ocurrió en Almirante Brown, donde Mariano Cascallares superó a La Libertad Avanza; en Avellaneda, con Jorge Ferraresi aventajando a JxC; en Berazategui (Juan Jose Mussi, sobre LLA); en Esteban Echeverría (Fernando Gray, sobre LLA); en Pilar (Federico Achával, sobre LLA); y en Ezeiza (Gastón Granados arrasó con el 60% a LLA).

 

También en Florencio Varela (Andrés Watson, sobre LLA); La Matanza (Fernando Espinoza dejó segundo lejos al Dipy, de LLA); Lomas de Zamora (Federico Otermín, sobre JXC); Presidente Perón (Blanca Cantero, sobre LLA); Quilmes (Mayra Mendoza volvió a vencer a Martiniano Molina de JXC); y Escobar (Ariel Sujarchuk, primer intendente del partido que irá por su tercer mandato, le sacó 26 puntos al candidato de LLA).

Los otros ganadores, con más de la mitad de los sufragios en sus pagos, estuvieron en José C. Paz (el histórico Mario Ishii, quien gobernó el distrito entre 1999 y 2011, y entre el 2015 y la actualidad, sobre LLA); Malvinas Argentinas (Leonardo Nardini, actual Ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de la provincia, vapuleó a sus rivales con el 60% y dejó atrás a LLA); Moreno (Mariel Fernández, sobre LLA); y San Fernando (Juan Francisco Andreotti, sobre JXC). En San Vicente, Nicolás Mantegazza fue récord, con 67%, casi 50 puntos por encima de los 18 de Francisco Maciel, de La Libertad Avanza.

Sin tanta preponderancia, pero con holgura, en General San Martín, Fernando Moreira (UPP) derrotó a su perseguidor Mauricio D’Alessandro, de JXC; en Hurlingham, otro camporista como Damián Selci dejó atrás a JXC; en Merlo, Gustavo Menéndez superó a los candidatos de LLA.

Muy poco para juntos

La debacle de Juntos por el Cambio sólo se detuvo en cuatro partidos: San Isidro, donde inusualmente no estará a cargo alguien de apellido Posse y se consagró Ramón Lanús, con el 48%; San Miguel, cuyo intendente seguirá siendo Jaime Méndez, votado por el 48% de los vecinos; Tres de Febrero (Diego Valenzuela, 47%); y Vicente López (Soledad Martínez, 50%).

La performance justicialista en su tradicional bastión fue, una vez más, una de las claves principales del balance de fuerzas en los guarismos nacionales. Tanto la reelección de Axel Kicillof como gobernador, como el ingreso de Sergio Massa -que en la Provincia superó el 43% de los votos- al ballotage, le deben mucho al poder territorial de esos intendentes y sus aparatos. Milei apenas creció en territorio bonaerense, y Bullrich se desplomó más de cinco puntos porcentuales.

 





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