Confirman el procesamiento de dos personas por espiar a Arroyo Salgado y Stiusso antes de la muerte de Nisman

La Cámara Federal porteña confirmó hoy el procesamiento de dos acusados por supuesto espionaje ilegal contra la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado a raíz de consultas de sus movimientos migratorios hechas en enero de 2015, sin orden judicial.

La decisión fue de los camaristas Martín Irurzun y Eduardo Farah, quienes confirmaron el procesamiento de los dos imputados, Pablo Pali y Alexis Lesa, por realizar inteligencia ilegal respecto de Arroyo Salgado y de Antonio Stiusso, ex funcionario de la ex SIDE, actual AFI.

Pali y Lesa quedaron procesados por supuestas “operaciones de inteligencia ilegales penadas por ley” en infracción a la Ley de Inteligencia Nº25.520.

La investigación se basa en consultas hechas sobre movimientos migratorios de Arroyo Salgado y Stiusso en enero de 2015, pocos días después que fuera encontrado muerto el entonces fiscal Alberto Nisman, ex esposo de la magistrada.

“Los movimientos migratorios de la jueza federal fueron consultados con el usuario de la Secretaría de Inteligencia el 27 de enero de 2015, a las 02:33:00 hs. Los de Stiusso, en treinta y ocho oportunidades desde el 18 de enero de 2015 a las 16:14:10 y 16:14:17 hs., hasta el 30 de enero de dicho mes, a las 13:04:27 hs.”, detalló la resolución. Las consultas del día 18 de enero son horas previas a que se conociera el fallecimiento de Nisman.

En todos los casos, “se activó una dirección de IP asociada al domicilio en Paraná, Entre Ríos, que era ocupado por Palá y Lesa y a un teléfono también vinculado a ellos. Ambos tenían a la época contratos con dependencias públicas de la Provincia mencionada y especialidad en informática”, agregó la Cámara.

Stiusso es querellante en la causa y asoció lo ocurrido, por las fechas, a la muerte del ex marido de la jueza, Alberto Nisman, al declarar que “no cabe otra opción que entrelazar todo con la muerte” del fiscal federal ocurrida el 18 de enero de 2015.

Los procesados habrían realizado “-en connivencia o bajo órdenes de otros- actos enmarcados en conductas caracterizadas por la clandestinidad y el secreto”, agregaron los camaristas.

En su declaración indagatoria ambos dijeron dedicarse a la actividad informática y que todo fue hecho en el marco de su actividad lícita.