Un conflicto de poderes está en puerta. Cristina Kirchner convocó a una sesión del Senado para hoy con el objetivo central, más allá de que se maquillará con un temario más amplio, de tratar el pliego de Ana María Figueroa, la jueza ligada al kirchnerismo que fue cesanteada por la Corte Suprema de Justicia por haber llegado a la edad jubilatoria.
Si la vicepresidenta logra que se apruebe ese pliego, un argumento para pedir su continuidad, el Poder legislativo entraría en colisión con el Judicial.
La bancada oficialista, que comanda el formoseño José Mayans, negoció hasta último momento de ayer para conseguir el número que le permita tratar un paquete de pliegos de jueces que tienen dictamen de la comisión de Acuerdos. Entre ellos está el de Figueroa, que fue jubilada por la Corte porque el mentado pliego no fue aprobado en tiempo y forma. Esto es: antes de que cumpliera los 75 años, hecho que ocurrió el 9 de agosto pasado, que es la edad que la Constitución Nacional dispone para el pase a retiro.
Lo dicho: el kirchnerismo tendría el quórum asegurado para dar inicio a la sesión, algo que no pudo lograr en los intentos pasados para insistir con el nombramiento de la magistrada. Lo ayudarían algunos legisladores de extracción peronista, que venían siendo díscolos.
La sesión también abordará la media sanción que le falta al proyecto que modifica el Impuesto a las Ganancias y la ley de Alquileres, una iniciativa que en Diputados fue aprobada por el impulso que le dio la oposición.
Guiado por Cristina, el oficialismo ya decidió desconocer el fallo de la Corte Suprema contra Figueroa. Increíblemente, aduce que lo que diga el máximo tribunal, encargado de interpretar la letra de la Constitución, no es pertinente en este caso.
La continuidad de esta jueza es de especial importancia para Cristina, embarcada en una pelea personal contra la Corte. Esa magistrada integraba la sala de la Cámara de Casación Penal que debía decidir si las causas Hotesur-Los Sauces y Pacto con Irán debían ir a juicio oral, luego de que tribunales de estamentos inferiores sobreyeran a la vicepresidenta sin siquiera realizar los correspondientes juicios orales.
La Sala en cuestión, luego del retiro de Figueroa, votó en favor de la realización de esos juicios, con el sufragio de los dos integrantes que quedaron. Se supone que Figueroa iba a votar en favor de los intereses de Cristina, pero venía demorando su voto para dilatar definiciones. Por eso el kirchnerismo ahora especula con la siguiente idea: si el Senado hoy le vota el pliego, podrán decir que sigue siendo jueza y entonces intentarán invalidar lo avalado por los jueces Diego Barroetaveña y Daniel Petrone en su ausencia.
Esta jugada, a todas luces cuestionable, tensó aún más la relación del peronismo con Juntos por el Cambio, que confirmó que no dará quórum. Sólo bajará al recinto si el Frente de Todos consigue por si sólo reunir los 37 senadores necesarios para iniciar el debate.
ALQUILERES Y GANANCIAS
El kirchnerismo apuesta a que incluir ley de Alquileres y la modificación de Ganancias en el temario sirva de anzuelo para convencer a otros senadores.
Como los dictámenes de la comisión de Acuerdos tradicionalmente se tratan en primer término se prevé que, esta vez sí, se someterán al pleno del cuerpo los 33 pliegos de jueces que se elevaron en su momento, incluido el de Figueroa que ya no es más jueza. Hay que recordar que hubo dos intentos fallidos y el amague de la semana pasada, cuando la sesión se cayó por problemas de salud de representantes del propio oficialismo.
Con 31 senadores, el Frente de Todos tuvo que salir a buscar aliados para conseguir que se traten aquellos pliegos judiciales que tienen dictamen.
Aparentemente, se aseguró el acompañamiento de la misionera Magdalena Solari Quintana, la riojana Clara Vega y del rionegrino Alberto Weretilneck -gobernador electo de esa provincia- para llegar al quórum. Werwtilneck daría el número pero votaría en contra de Figueroa. El kirchnerismo hubiera preferido que se abstenga.
Anoche sobrevolaba el misterio respecto a lo que harían los representantes de Unidad Federal, peronistas no kirchneristas: María Eugenia Catalfamo, la puntana que responde a Alberto Rodríguez Saá; el jujeño Guillermo Snopek; el entrerriano Edgardo Kueider (todos han tenido gestos de acercamiento a Cristina en el último tiempo, por lo que probablemente acompañen); el correntino Carlos “Camau” Espínola y la cordobesa Alejandra Vigo, que es la esposa del gobernador Juan Schiaretti, candidato presidencial el 22 de octubre próximo.
Dato: la sesión probablemente sea encabezada por presidenta provisional del Senado, Claudia Ledesma Abdala. Al parecer, Cristina sigue con su plan de aparecer lo menos posible en la escena pública.
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